Chantecler
Semanario Humorístico Ilustrado
Chantecler. Semanario humorístico ilustrado, que circuló en Concepción desde el 23 de abril de 1910, hasta el N°172, el 1 de noviembre de 1913, con una duración de tres años y medio. En su presentación en el N°1 manifiesta que su “única ambición filosófica consiste en traer un adarme de sonrisa al ceño adusto de nuestro vivir cotidiano”. Agrega que no asume ninguna doctrina filosófica, religiosa, científica ni social.
La palabra CHANTECLER proviene de 2 palabras francesas: Chanter (cantar) y Cler o clair (fuerte y claro), usado para nombrar a un gallo, por el dramaturgo francés Edmond Rostand (1868-1918), en su obra “Chantecler”, estrenada en 1910, en cuya trama todos son animales de granja, siendo el gallo el personaje principal.
Su manifiesto con el título “Telón de boca” (Rev. N° 1), haciendo alusión a su nombre, dice que “cantará en todos los tonos…dispuestos a cantar con la más correcta claridad…respetará a todos los chantecleres y a los pollos que aún no llegan a chantecleres…tratando con exquisitos miramientos a las faisanas y la bulliciosa y simpática tribu de las pollas que aspiran a ser faisanas. Con estas palabras grafica en cuerpo y alma el sentido de sus entregas semanales, que mantuvo a lo largo de su existencia, con gran regocijo de sus lectores.
Al decir de don Fernando Campos Harriet, fue “un despertador, como el gallo que con su clarín despierta a la noche, rompiendo lo oscuro y tenebroso en la línea matinal del horizonte”.
Se caracterizó por sus ilustraciones y fotografías de los sucesos recientes de Concepción, con caricaturas, donde destacaban las de portada a todo color. Se adornaba cada edición con la fotografía de una bella dama de la sociedad, aportadas por Vogel, casa de fotografías de la época. En sus páginas se da cuenta de los sucesos mundiales y nacionales, novedades literarias y de la vida cotidiana, teatral y social de Concepción.
Su director y redactores, en su gran mayoría utilizaron seudónimos siendo difícil su identificación, al cambiar frecuentemente sus nombres. La llamada “Generación del Chantecler”, compuesta por estos y por aquellos que no ocultaban su nombre, tuvo como colaboradores a : Ignacio Verdugo Cavada, Jorge Dowton, Ezequiel de la Barra Orella, Rosamel del Solar López, Eduardo Espinoza Ferro, Samuel A. Lillo Figueroa, Norberto Soto, Andrés Silva Humeres, Luis Garretón Silva, Ovidio Fernández Ríos, Luis David Cruz Ocampo, Rodrigo de Triana (varela), Alfredo Larenas Larenas, Edmundo Larenas Guzmán, Agustín Castellano Reyes, Víctor Bahamonde Hoppe y otros.
“En suma: toda esta eclosión intelectual que provocó Chantecler y la generación penquista de 1913, alcanza una resonancia nacional y no es del todo ajena, sino más bien es un preludio, de la creación de la Universidad de Concepción en 1917.
(Resumido de: Fernando Campos Harriet, “La generación del Chantecler en Concepción 1910- 1913”, Boletín de la Academia Chilena de la Historia N° 96, año 1985, Santiago).